Magdalena obliga a cambiar la tradición
El nacimiento de un miembro de la familia real sueca implica la activación de protocolos y tradiciones medievales, aunque esta vez el rey se ha visto obligado a hacer cambios.
© V. de los Espadas – JM Noticias
La princesa Magdalena de Suecia en Nueva York, dos meses antes de dar a luz a una niña. (Foto: Selfie vía Facebook) – Pulsar para ampliar –
El embarazo de la princesa Magdalena de Suecia llegó a su fin el pasado 20 de febrero en Nueva York, casi un mes antes de lo anunciado, pero sin levantar tanta expectación como el de su hermana mayor, la princesa heredera Victoria, cuando dio a luz a su hija Estelle.
Se sabía que el bebé de Magdalena sería una niña porque la propia princesa lo dijo. Se sabía que nacería en Nueva York porque así lo quisieron sus padres. También se sabía que la niña perdería sus derechos dinásticos si no era educada en Suecia bajo la religión protestante de la iglesia sueca, a no ser que su abuelo el rey Carlos XVI Gustavo cambiara los reglamentos y lo impidiera.
Ahora bien, el nacimiento de un miembro de la familia real sueca conlleva el cumplimiento de una serie de tradiciones protocolarias de reminiscencias medievales, que aunque suceda a miles de kilómetros de Estocolmo, no van a dejar de cumplirse aunque tengan que hacer algunas variaciones.
Un parto con testigos.
Lo primero que llama la atención es que, de la misma manera que se hacía en la antigüedad y en otras cortes europeas, el parto de una reina, en este caso de una princesa sueca, se debe hacer ante la presencia de testigos.
Ahora bien, aunque hoy día ya no se obliga a los testigos a estar presentes en el paritorio o aposentos reales en el momento del nacimiento, tanto el Primer Ministro, que es un sirviente del Rey, como el Vocero real, el Mariscal del Reino y la Maestra Jefa de Lacayos de Palacio, están obligados a firmar al día siguiente del parto, siempre y cuando no sea un sábado, un documento oficial donde declaran haber sido testigos del resultado del mismo. Este documento será lacrado con el sello real y guardado en los archivos reales.
El Mariscal del Reino es el encargado de comunicar por escrito el nacimiento de un nuevo miembro de la familia real. (Foto: captura web casa real) – Pulsar para ampliar –
Curioso que según esta tradición, y también las siguientes, se exige que el día de su cumplimiento no debe ser un sábado y, caso que así fuera, el acto se celebraría el lunes siguiente.
En esta ocasión el problema surgió porque el parto de la princesa Magdalena fue fuera de las fronteras del reino, en el centro médico Presbyterian Weill Cornell de New York.
Por tanto, el acto protocolario que tenían que hacer los testigos se tuvo que trasladar, pero de forma excepcional, a dos médicos del centro hospitalario. Ambos facultativos han testificado por su honor y ante el rey, que la niña que han ayudado a traer al mundo es hija de la princesa Magdalena.
El comunicado en las redes sociales.
Una de las obligaciones del Mariscal del Reino es comunicar el nacimiento del nuevo miembro de la familia real. Primero se lo debe decir al Rey y luego a las autoridades. Una vez completado este orden protocolario, su obligación es emitir un comunicado por escrito anunciando la llegada al mundo del recién nacido. En los viejos tiempos era obligación del Vocero del Reino salir a leer el escrito a la plebe y así dar la buena nueva por las calles y plazas de la capital.
Pero hoy día ni siquiera se va a usar papel. Según la casa real, el comunicado del Mariscal del Reino se publica en Internet, tanto en la web oficial de la Casa del Rey (www.kungahuset.se), como en la página en Facebook (www.facebook.com/kungahuset).
Dos salvas de 21 cañonazos desde las baterías de Skeppsholmen (El islote de los barcos) para anunciar el nacimiento. (Foto: Holger Ellgaard – Wikimedia Commonsl) – Pulsar para ampliar –
Las salvas de los cañones.
Las salvas de los cañones es la forma tradicional de dar un saludo de bienvenida a un nuevo miembro de la familia real en los países nórdicos.
Según el protocolo de ceremonias de la Defensa y Estado Mayor de Suecia, llamado Cerl FM 2010, las salvas de cañonazos se efectuarán el mismo día del nacimiento desde las baterías de Skeppsholmen (El islote de los barcos) de Estocolmo. Si éste sucediera por la noche, las salvas se dispararán al mediodía del día siguiente.
Caso que el recién nacido sea el primogénito del jefe del Estado, que en este caso es el Rey, o bien otro heredero al trono de Suecia, se dispararán dos salvas de 21 disparos cada una con un intervalo de un minuto entre ambas. Estas salvas también se dispararán desde las baterías de los cuarteles y fortalezas de Boden, Härnösand, Vaxholm, Fårösund, Karlskrona y Göteborg, pero después de Skeppsholmen. La bandera debera ser izada en el castillo real de Estocolmo y en los cuarteles y fortalezas de todo el reino.
Convocar al Consejo del Reino.
El nacimiento de un nuevo miembro de la familia real sueca implica también convocar el Consejo del Reino. Según el capítulo 5º, artículo 3º de la normativa gubernamental, el Gobierno tiene la obligación de reunirse bajo la presidencia del Jefe del Estado, que en este caso es el Rey.
El rey informa al Gobierno del nombre, título y apodo del nuevo miembro de la familia real en el Consejo del Reino. (Foto: Kungahuset.se) – Pulsar para ampliar –
En esta reunión es donde el monarca debe informar al Gobierno del título, nombre y apodo que tendrá el nuevo miembro de la familia real, además del ducado o condado que concede, en este caso, a la nueva heredera al trono. Si se cumplen todas las condiciones, la niña ocupará el quinto lugar en la línea de sucesión.
El Consejo del Reino se celebrará al día siguiente del nacimiento, siempre y cuando no sea un sábado, que si se diera el caso entonces se celebraría el lunes siguiente.
Dado que la niña nació en los Estados Unidos, el Consejo del Reino se celebrará cuando decida el Rey. Según la casa real, en el caso de la hija de Magdalena será el miércoles 26 de febrero a las 15:00 horas en el castillo real de Estocolmo.
Lo que ya se sabe, en el momento de escribir esta historia, es que la hija de Madde, como llaman a Magdalena en su casa, tendrá un título, a pesar que seguirá residiendo con sus padres en Nueva York y tener la nacionalidad estadounidense por nacimiento y por su padre.
Un oficio religioso solemne «Te Deum»
El «Te Deum» o acción de gracias es una antigua ceremonia religiosa cristiana. En los actos importantes de la realeza sueca, como son los nacimientos, bautizos, cumpleaños, jubileos u otro tipo de celebraciones, la familia real acude al completo a este oficio religioso solemne, como hicieron tras el nacimiento de la princesa Estelle en el 2012 y con motivo de los 40 años del rey Carlos XVI Gustavo en el trono en el 2013.
Capilla del castillo real de Estocolmo. (Foto: Holger Ellgaard – Wikimedia Commons) – Pulsar para ampliar –
El «Te Deum» se celebra en la «Slottskyrkan» (La Capilla del Castillo Real) de Estocolmo, el día siguiente del parto, siempre y cuando no sea un sábado, porque si es así se pasará entonces al lunes. Los invitados a esta ceremonia religiosa son, aparte de la familia real más cercana, los representantes del Parlamento, del Gobierno, así como representantes de la Suecia oficial y del personal de la Corte.
Como la princesa Magdalena dio a luz en Nueva York y su padre el rey tuvo que viajar a la ciudad de los rascacielos para ver a su segunda nieta, el «Te Deum» se celebrará con retraso. Según la casa real, será el domingo 2 de marzo.
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