Una princesa y dos anillos de prometida

Magdalena de Suecia vuelve a lucir un valioso anillo de prometida mientras su ex, Jonas Bergström, anuncia su compromiso de boda con la mejor amiga de la princesa.

© V. de los Espadas – JM Noticias

Cuando el pasado 25 de octubre se anunció el compromiso de la princesa Magdalena de Suecia con el financiero Christopher O’Neill, la benjamina de los reyes Carlos Gustavo y Silvia lucía un anillo de compromiso valorado entre uno y dos millones de coronas suecas, equivalente a entre 116 y 232 mil Euros.

Sin embargo, y al contrario de lo que se hizo en agosto del 2009, cuando Magdalena se comprometió con el abogado Jonas Bergström, esta vez poco ha trascendido sobre el nuevo anillo de compromiso, que la princesa sólo ha mostrado a los más íntimos y en las fotos oficiales que la Casa Real ha hecho públicas.

Han tenido que pasar tres años, dos meses y catorce días desde aquel 11 de Agosto del 2009, día que la princesa Magdalena mostraba orgullosa en Soliden, la residencia de verano de los monarcas suecos en la isla de Öland, el anillo de compromiso que le había regalado Jonas Bergström.

Era un anillo de Bukowski con un diamante tallado en forma de esmeralda que «Madde» ya tenía desde hacía dos meses, cuando Jonas le pidió matrimonio en la isla Capri, y que lo pudo mostrar por primera vez el día del anuncio oficial del compromiso de boda. Según los expertos, ese anillo estaba valorado entre 25.000 y 40.000 Euros, una quinta parte del valor del anillo que ahora le ha dado Christopher O’Neill.

En aquella ocasión Magdalena también lucía la llamada «pulsera del amor», un brazalete de Cartier que estaba valorado en unos 5.000 Euros, y que representaba «el cinturón de castidad» de la princesa porque sólo Jonas tenía la llave.

Un caso de cuernos rompió el compromiso.

Ocho meses después, en Abril del 2010, Magdalena se vio obligada a romper su compromiso con Jonas, tras conocerse por medio de una revista, que su prometido le había sido infiel con Tora Uppstrøm Berg, una deportista noruega que Jonas conoció una noche en una estación de ski en Suecia.

El anillo y el brazalete desaparecieron de la mano de la princesa y ese mismo día, el 24 de Abril del 2010, «Madde» volaba a los EE.UU junto con su perro «Zorro», huyendo del escándalo y la humillación.

Y tal vez por aquello que un clavo saca a otro, no pasaron ni tres semanas desde su fuga hasta que se la vio por primera vez en compañía de Christopher O’Neill en una cafetería de Nueva York.

El sueño de toda suegra.

Chris O’Neill, estadounidense de 38 años y millonario al que se describe como el sueño de todas las suegras, ha sido muy criticado en los medios suecos por sus actividades como socio y asesor financiero de la empresa Noster Capital.

Durante la crisis financiera del 2008, cuando los mercados bursátiles del mundo sufrieron caídas de 25% en sólo dos meses, el valor de la sociedad Noster Capital creció un 9%, según Financial News, debido a operaciones de especulación realizadas por Chris y sus socios.

El diario sueco Aftonbladet cuenta también que Noster Capital apostó en el 2011 por los bonos de Estado de países en desarrollo que «iban a dar problemas» y sus activos se refugian en paraísos fiscales.

Así se compra una princesa.

Chris O’Neill no tardó mucho tiempo en conseguir «conquistar» a Magdalena. A principios de mayo del 2010, tres semanas después que «Madde» se instalara en Nueva York para curarse las heridas de la ruptura con Jonas, se recibió una importante donación en la World Childhood Foundation, la fundación de protección de la infancia creada por la reina Silvia y donde Magdalena «trabaja» como «jefa de proyectos». Christopher O’Neill había donado 100.000 dólares para los proyectos de ayuda a los niños en Camboya, Moldavia y Suráfrica.

En los EE.UU las donaciones para obras de caridad son la forma de no tener remordimientos de conciencia por el modo de ganar dinero, que en el caso de Chris y Noster Capital, tenía doble intención. Por un lado desgravar de impuestos y por otro acercarse a Magdalena.

Y el dinero hizo su efecto. No tuvo que pasar mucho tiempo, en realidad sólo mes y medio, ni tampoco Chris tuvo hacer muchos regalos, para que Magdalena entrara una noche en casa de Chris y saliera por la mañana, según publicaba el Aftonbladet. A partir de ahí todo fue muy rápido y pronto ambos se fueron a vivir juntos en un lujoso apartamento en Manhattan. Ahora ya están comprometidos para casarse en el 2013, si antes no pasa lo mismo que con Jonas y Chris le pone también los cuernos a Madde.

El nuevo anillo de compromiso.

Todo el mundo al que se le pregunta da por seguro que Chris compró el exclusivo anillo de compromiso bien en Cartier o en Tiffany. Según los expertos nórdicos que han analizado esta joya a través de las fotografías, el anillo está hecho de oro blanco o de platino. En el centro lleva un diamante cuadrado y engarzado por las cuatro esquinas, de tal manera que pueda reflejar bien la luz en todas sus facetas. Según el famoso joyero noruego Christian Langaard, es posible que se trate de un diamante de por lo menos 4 quilates y ha sido tallado en 61 facetas. Todos coinciden también que se trata de una pieza única y apuntan a un precio que supera los cien mil euros pero que también puede superar los doscientos mil.

Un compromiso lleva a otro.

Dos días después que la Casa Real sueca hiciera público el nuevo compromiso de boda de la princesa Magdalena con Chris O’Neill, el ex de la princesa, Jonas Bergström, también anuncia su compromiso.

Según la revista Svensk Damtidning, resulta que Jonas se ha comprometido con Stephanie af Klercker, con la que compartía cama y mantel en los últimos dos años y era amiga de la infancia de Magdalena. «Nos comprometimos hace un par de semanas y estamos muy contentos» confirmó Stephanie af Klercker a la revista sueca.

Jonas no pasó mucho tiempo solo tras la ruptura. Stephanie, nacida como Magdalena en 1982, era amiga íntima de la princesa y ambas habían crecido juntas. Pero Stephanie no dudó ni un momento en romper con su novio Ludvig Blomqvist, que era compañero de colegio y amigo de Jonas, para irse precisamente con éste cuando quedó libre tras la ruptura con Madde. Difícil de entender todos estos cambios de pareja, pero así son las cosas en Suecia y sin resentimientos.

Jonas y Stephanie tienen muchos amigos en común con sus respectivos ex. Ahora sólo falta que Madde fije la fecha de su boda con Chris para que también lo hagan Jonas y Stephanie, cuya intención es casarse el mismo día.

Y que a nadie le extrañe si en un futuro no muy lejano hasta se divorcien y Magdalena y Jonas vuelvan a estar juntos. ¡Hagan sus apuestas!

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